Después de contraer nupcias con la diosa Mary Rock, el semental Marco Bull ha tomado una arriesgada decisión: irse de luna de miel también con Vanna Bardot. El caballero indudablemente tiene gran apetito sexual y aunque resulta descabellada su idea, las dos mujeres se ponen de acuerdo y aceptan la invitación.
La escena es candela, porque dadas las circunstancias, este trío saca astillas a la pantalla. Las dos diosas trabajan juntas para que su comensal disfrute a más no poder y ellas a cambio, reciben generosas embestidas en el interior de sus culos.