La hermosa rubia Angie Lynx está muy caliente y echa de menos a su ex, ¡o al menos su verga! Se pone lencería sexy y le manda fotos metiéndose los dedos en el culo. El semental Jesús Reyes no se puede resistir ante las insinuaciones de la diosa y acude de inmediato.
Angie lo recibe y le saca la verga negra y empieza a mamar sin cansancio para unos segundos después, cabalgar sobre sobre ese enorme pedazo de carne erecta. El comensal decide empotrarle el culo y el sexo anal que tanto la bella Angie necesitaba es lo que predomina en el resto de la escena.